Periodista: Prensa An. / Fotografo: Prensa An.
Como «vergonzosa» calificó la presidente de la Comisión Especial de Justicia y Paz Delsa Solorzano, el informe final de mandato de Michelle Bachelet como Alta Comisionada de Derechos Humanos, durante un balance presentado este jueves en un foro organizado por la referida comisión.
«Lo que ha dicho la señora Bachelet en su último informe con relación al caso Venezuela es vergonzoso, parece escrito por un funcionario del régimen, no parece escrito por una persona dedicada a la labor de defender los derechos humanos de una nación oprimida como la nuestra», aseguró.
Dijo que destacar, en el informe, que en el país la situación de DDHH mejoró es una burla para las víctimas. «Pretender decir que se da por satisfecha la justicia en casos atroces como los del capital Acosta Arevalo o del concejal Fernando Alban y tantos otros, es una burla no solamente para las víctimas sino que deshonra a nuestros héroes asesinados».
Solórzano agregó que el referido texto, más allá que en efecto destaca que en el país hay tratos crueles y torturas, «tristemente desconoce varios hechos que son de suma gravedad como, por ejemplo, el hecho que se ordenó en su momento que se cerraran los calabozos de prisioneros políticos y hoy siguen operando. La oficina de la señora Bachelet no ha ingresado a las cárceles como debería».
Por su parte Marta Tineo, coordinador general de la organización de DDHH Justicia, Encuentro y Perdón, detalló que en los últimos cinco años, la oficina de la Alta comisionada de Derechos Humanos para Venezuela «realizó una reseña pormenorizada y exhaustiva de la realidad, de la crisis de derechos humanos que ha enfrentado nuestro país, claramente además de narrar la historia, de hacer exhortos y recomendaciones, evidentemente la situación de Venezuela, al ser tan grave, demanda acciones concretas y allí pudiera estar el gran reclamo».
Dijo que para los venezolanos poco importan los exhortos y recomendaciones «si en el siguiente informe van a reseñar que ya no son 100 sino 200 los torturados, que ya no son 200 los presos políticos sino 300 o que subió o bajó la cifra, mas allá de valorar la actuación de Bachelet, lo cierto es que lamentablemente estos organismos no tienen las capacidades que la urgencia de la situación de Venezuela demanda».
Tineo recordó que la situación venezolana se está reseñando desde hace más de una década y lejos de mejorar se agrava cada día. Aseguró que una decisión que debería tomar el Consejo de Derechos Humanos, durante el próximo ciclo de sesiones de septiembre, es renovar el mandato de la Misión Internacional Independiente de Determinación de Hechos para Venezuela, «porque sin duda los informes que realizan y alimentan el proceso de investigación que se sigue ante la fiscalía de la Corte Penal Internacional, han sido una suerte de muro de contención».
Mientras que Molly De La Sotta, directora de la Organización de Familiares de Presos Políticos, asegura que resulta «doloroso» leer el informe de Bachelet en el que reconoce las reformas policiales y «habla bien del régimen, asegurando que ha cooperado». Dijo que los familiares de los prisioneros de la dictadura, deben seguir denunciando «para lograr mejores condiciones para ellos».
Lamentó que el informe no se hiciera mención de la huelga de hambre y el intento de suicidio de presos políticos desesperados por las torturas a las que son sometidos con frecuencia dentro de los calabozos que, en muchos casos, «tienen el tamaño de un closet y no cuentan con ventilación».