Periodista: Prensa An. / Fotografo: Prensa An.
América Latina específicamente Venezuela, Argentina, Brasil, y México, podrían ser tremendamente beneficiados por el desarrollo de sus hidrocarburos ante la situación geopolítica, pero es necesario hacer grandes inversiones, planificación, reducir el riesgo país, contar con instituciones sólidas y correctas. “Se debe aprovecha esta gran oportunidad para desarrollar los hidrocarburos en la región”.
Así lo afirmó el director del programa de Energía para América Latina de Baker Institute, el economista y especialista en energía, Francisco Monaldi quien hizo una exposición sobre la “Crisis geopolítica e impacto sobre la Industria Petrolera en Latinoamérica”, durante la reunión ordinaria de la Comisión de Energía y Petróleo de la Asamblea Nacional legítima.
Antes de comenzar el presidente de la Comisión de Energía y petróleo, Elías Matta, señaló algunos de los temas de interés sobre el tema energético actual de Venezuela, habló sobre el desastre de la Industria Petrolera, producto de la corrupción y de la falta de inversión, aun cuando se habla de una recuperación paulatina y la producción hoy está en unos 700 mil barriles
Igualmente hizo referencia al informe del Banco de Inversión Suizo Credit Suisse, que pronostica que el crecimiento de la economía venezolana será de un 20 por ciento, por el aumento del sector petrolero, mientras que otro analista, como Asdrúbal Oliveros, consideran que tendrá un crecimiento de 7 por ciento y que el ingreso petrolero venezolano aumentará producto de los precios, que van a pasar de 5 mil millones de dólares que tuvo en el 2019 a unos 16 mil 400 millones este año 2022.
Crisis geopolítica ha cambiado los precios del petróleo
Monaldi, durante su exposición destacó que la crisis geopolítica ha cambiado el escenario de precios del petróleo, la invasión de Rusia a Ucrania, las sanciones de Europa y Estados Unidos contra Rusia, que ha bajado su producción y venta de petróleo, han provocado estos cambios que inciden en el mercado energético.
Dijo que América Latina tiene el 19 por ciento de las reservas petroleras del mundo y casi todas están concentradas en Venezuela, es decir, que el país tendría el 94 por ciento de las reservas de América Latina.
Indicó el especialista en energía, que las implicaciones del comportamiento de los precios y producción de petróleo es una gran incertidumbre, antes el carbón era sustituido por el petróleo y ahora se está planteando una reducción absoluta de los montos de carbón, petróleo, incluso el gas, para el año 2050, esto a su juicio es un cambio colosal y la incertidumbre es gigantesca.
“Esto indica que va a haber una gran volatilidad de precios, una característica del mercado, pero debería ser peor en los próximos años porque hay variables que están haciendo que el precio del petróleo baje, pero hay variables geopolíticas que provocan que los precios del petróleo suban. En todos estos escenarios la Opep es un actor importante sube su poder, aunque sea un mercado más pequeño y sube la variable geopolítica, eso podría beneficiar a países latinoamericanos”.
Argumentó que, si no se usan las reservas oficiales, sino los estimados, que considera más sensato, Venezuela sigue siendo el país con más recursos, pero Brasil Argentina y México son países con un potencial gigantesco.
“Todos estos países si hacen las cosas correctamente tendrán una gran potencia importante porque están en el hemisferio occidental lejos de los conflictos del Medio Oriente, como de Rusia o de Asia Central. Claro, si es una competencia de costos siempre va a ganar el Medio Oriente, pero si hay políticas públicas que puedan favorecer a países del hemisferio occidental por razones de seguridad energética,eso podría darle una ventaja más a largo plazo”.
Agregó que, no necesariamente se daría, pero sin duda, las circunstancias geopolíticas y de seguridad energética han cobrado importancia otra vez, que pareciera que va a seguir existiendo, aunque recordó que en los años 70 y 80 se pensaba que la situación geopolítica iba a dominar el tema petrolero y en los 90 el precio colapsó y el mundo pensó que se había acabado la geopolítica, por lo que estima que hay que ser cauteloso.
Advirtió que la ventana de oportunidades es limitada, dos o tres décadas, eso no quiere decir que no se va a producir nada de petróleo dentro de 100 años, si se va a producir petróleo, pero es muy posible que sea bastante diferente como se use, que las rentas sean mucho menos elevadas y que Venezuela no sea tan competitiva.
“Venezuela tiene un problema que, aunque los costos son relativamente bajos, no son tan bajos como los del Medio Oriente, ciertamente tiene la desventaja que el petróleo pesado es más intenso en emisiones y aunque Venezuela tiene una capacidad de usar secuestro de carbón, por ejemplo, en la cuenca del Lago de Maracaibo. Sin embargo, en la faja no tiene tanta oportunidad, de manera que hay unos desbalances en cómo puede Venezuela resolver su problema de intensidad de carbono”.
Otras de las limitaciones que planteó para América Latina y Venezuela es que para que un país siga siendo competitivo requiere mucha tecnología, instituciones muy sólidas, hacer grandes inversiones en el país, producir carbono para poder transportar productos y este tipo de inversiones para Venezuela son muy difícil de lograr, dado el riesgo país.Recordando que en los últimos 20 años no se han logrado inversiones básicas.
“La geología es super favorable en América Latina, pero el drama de la región son los riesgos políticos, institucionales e ideológicos”.
Finalmente, aseguró que hay una oportunidad que requiere de mucha inversión, inteligencia, planificación, manejar la volatilidad e incertidumbre geopolítica, “pero si no tenemos las instituciones correctas y no sabemos reducir nuestro riesgo país y riesgo político lamentablemente vamos a desaprovechar esta gran oportunidad en que Venezuela, Argentina, Brasil y México, podrían ser tremendamente beneficiados por el desarrollo de sus hidrocarburos”, concluyó.