11.03.2021.- Hoy, en el seno del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, se llevó a cabo la actualización oral de la Situación de Derechos Humanos en Venezuela (relativo al ítem 4 del Consejo) en voz de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet; posterior a la actualización tuvo lugar un diálogo interactivo entre países miembros, observadores y Organizaciones No Gubernamentales. El ítem 4 corresponde a la presentación de situaciones de derechos humanos que requieren la atención del Consejo.
A propósito de esta actualización, el Comisionado para la Organización de Naciones Unidas, Miguel Pizarro señaló: “Hoy 55 países del mundo se sumaron en la declaración conjunta que condena las violaciones de derechos humanos cometidos por el régimen de Nicolás Maduro. En esta oportunidad, Venezuela vuelve a ser tema de discusión ante las instancias más importantes del mundo diplomático; no obstante la Alta Comisionada reiteró que, a pesar de sus recomendaciones, los derechos sociales, económicos, civiles y políticos siguen siendo vulnerados por parte del régimen, el cual hace días se jactó de su respeto a la democracia y a los derechos humanos de los venezolanos en el seno del Consejo”.
“La muerte trágica de al menos 28 migrantes venezolanos en el mar Caribe en diciembre de 2020 fue un recordatorio de las decisiones que algunos se ven forzados a tomar, así como su vulnerabilidad ante las redes de tráfico y trata de migrantes”, indicó la Alta Comisionada en su actualización.
Asimismo, Michelle Bachelet, quién a inicios del Consejo mencionó su preocupación respecto a los tratos recibidos por los detenidos dentro de los centros de detención en Venezuela reiteró: “Me preocupan los informes sobre muertes en detención a causa de la tuberculosis, desnutrición y otras enfermedades. Garantizar una alimentación y una atención sanitaria adecuadas es crucial para evitar más muertes trágicas como la de Salvador Franco”.
“Desde hace años hemos denunciado la continua reducción del espacio cívico y democrático en Venezuela, pero recientemente hemos visto como el régimen se ha puesto la misión personal de perseguir, intimidar, amedrentar y acosar a quienes realizan labores humanitarias en el país. Es un peligro que ante la incipiente amenaza de la Emergencia Humanitaria Compleja, exacerbada por la COVID-19, y el deterioro de los servicios el régimen busque castigar a quienes día a día luchan por salvar la mayor cantidad de vidas posibles”, estableció el Comisionado Pizarro.
Durante el debate que tuvo lugar después de la alocución de la Alta Comisionada, el representante del Perú, vocero de una declaración conjunta firmada por 55 países, hizo hincapié: “Reiteramos nuestro llamado a acabar con la represión y los ataques a los actores políticos, defensores de los derechos humanos, las organizaciones humanitarias, periodistas y trabajadores de los medios. Insistimos en la liberación inmediata e incondicional de todas las personas detenidas arbitrariamente, como han recomendado el Alto Comisionado y la Misión de Investigación”.
Por su parte, la Unión Europea solicitó al régimen que “garantice un acceso pleno y sin obstáculos a los relatores especiales sobre detenciones arbitrarias, desapariciones involuntarias y forzadas, ejecuciones extrajudiciales y que cooperen plenamente con Naciones Unidas y con sus mecanismos”.
“La mayor preocupación del régimen no es que sucedan las violaciones de DDHH de manera flagrante y sistemática, sino que el mundo lo sepa; un ejemplo de esto es la persecución a los trabajadores sanitarios para poder controlar al flujo de información sobre la pandemia del COVID-19, de tal manera que no se afecte la imagen del régimen”, indicó el representante de Colombia.
“Tanto el día de ayer, con la actualización oral del informe de la Misión Internacional Independiente de determinación de los hechos sobre Venezuela que habló sobre la persecución, hostigamiento y amedrentamiento en contra de medios de comunicaciones, defensores de DDHH, ONG y actores políticos; como el día hoy con la actualización de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos sobre la situación de los DDHH en el país que mencionó ejecuciones extrajudiciales, naufragios, precariedad en los servicios básicos y negligencia dentro de los centros penitenciarios, se pone en evidencia que mientras el régimen se jactó en pleno seno del Consejo de que estaban construyendo una República utilizando como pilar los derechos humanos, la realidad es otra. Así como lo mencionaron tanto la Misión y como la Alta Comisionada, en Venezuela aún se persigue, se hostiga, se amedrenta y se amenaza a quienes buscan trabajar en pro del desarrollo del país”, indicó el Comisionado.
Para finalizar, el Comisionado Pizarro apuntó: “Esperamos que en el próximo periodo de sesiones del Consejo, la Alta Comisionada Michelle Bachelet presente un informe exhaustivo sobre la situación de los DDHH en Venezuela, el cual, debe reflejar el estado de las recomendaciones realizadas al régimen en sus informes anteriores: disolución de las FAES, investigaciones sobre el Arco Minero del Orinoco, reformas para garantizar la independencia judicial y medidas que garanticen el pleno disfrute de los DDHH en Venezuela; recomendaciones que al momento han sido ignoradas”.