Los diputados de la Asamblea Nacional, en Sesión Ordinaria de la Comisión Delegada celebrada este martes, durante el debate sobre la crisis generada por la inexistentes políticas económicas a favor de la población y el aniquilamiento del poder adquisitivo del venezolano en manos del régimen rechazaron la aprobación ilegitima de la Ley de Impuesto de Grandes Transacciones Financieras, la cual causará más empobrecimiento en los venezolanos.
“Impuesto ilegítimo”
El diputado Ángel Alvarado, explicó que la hiperinflación que viven los venezolanos con respecto a la moneda Bolívar se trasladó a una inflación en dólares, como consecuencia de la política que lleva a cabo el Banco Central de Venezuela (BCV) sobre el encaje legal y la fijación de tipo de cambio como anclaje para detener la hiperinflación.
Criticó la actual estrategia política económica fracasada del régimen de “estimular el uso del Bolívar” desde el punto de vista de la capacidad del consumo del venezolano aunado a que las transacciones en dólares tendrán un impuesto, lo cual a su opinión, “es ilegitimo y sin consentimiento aprobado por un parlamento ilegitimo que no goza de reconocimiento nacional e internacional”
Alvarado reiteró que “la política economía está haciendo mella en el pueblo venezolano” e indicó que en los últimos años, el costo de la canasta alimentaria tuvo un aumento del 75%, precisando que se necesita 365 dólares para adquirirla.
BCV cómplice*
En opinión del diputado Omar Barboza, presidente de la Comisión Ordinaria de Legislación de la AN, “Venezuela ha sido sometida al impuesto más eficiente para generar pobreza es: La inflación, la cual llego a su máxima expresión a partir del año 2017, cuando se pudo calificar como: Hiperinflación, siendo las victimas principales de este fenómeno, los sectores más desposeídos que vieron destruido el producto de su trabajo”.
Esto aseguró, como consecuencia, de la falta de una política económica a favor de la población y el interés nacional y explicó que la causa de la hiperinflación se conformó por los déficits fiscales que se acentuaron a partir del año 2014, financiados primordialmente, por emisiones de dinero inorgánico por el BCV, sometido al control político del régimen, ocultó la realidad y se convirtió en el principal cómplice de la destrucción de nuestra moneda, cuando su deber constitucional es preservar su valor adquisitivo.
Advirtió que la reforma la Ley de Impuesto de Grandes Transacciones Financieras, “es un intento por meterle la mano en el bolsillo a los venezolanos; perseguir a los venezolanos que han sobrevivido poniendo en riesgo la cierta estabilidad de los precios generada por la dolarización de hecho, mientras la pobreza sigue creciendo en Venezuela”.
Bicoca para el régimen*
Para el diputado José Ricardo Salazar, el régimen no cesa en su intención de destruir la calidad de vida del ciudadano venezolano, refiriéndose que los ciudadanos para mantener sus ingresos deban recurrir al uso y pago de divisas extranjeras, lo cual, tendrán que pagar un impuesto donde el régimen obtiene la bicoca desde 3% al 20% por cada transacción.
Rechazó la Ley de Impuesto de Grandes Transacciones Financieras y reveló que en la reforma, existen algunos artículos que estipulan el cobro de impuesto a transacciones en divisas para bienes y servicios. Aseguró que esto profundizara el empobrecimiento masivo de los venezolanos.
Entre tanto, el diputado Ricardo Aponte, indicó que la economía venezolana disminuyó un 85% lo que trajo como consecuencia, una recesión económica que originó el descenso sostenido de la inversión; pulverización del salario producto de la baja capacidad económica del sector público y privado y la migración forzada.